HISTORIA SOBRE LA EXPULSIÓN DE LOS MORISCOS

Amanece como cada día en Villa Rubias de los Ojos (Castilla La Mancha), y todos los habitantes se van a trabajar, incluidos los llamados moriscos, descendientes de los musulmanes hispánicos.

A media mañana coincidiendo con la pausa del trabajo, los trabajadores vuelven a sus casas para almorzar. A lo lejos se vio un grupo de hombres, seguramente que trabajan para el rey, que venían a caballo. En los últimos días ya Los habían informado acerca de la idea de expulsar a los moriscos de la Península, estos hombres lo confirmaron. Esta expulsión se llevó a cabo en tres fases;

Primeramente a los habitantes de Villa Rubias de los Ojos se les trasladó a Francia, pero en poco tiempo todos ellos volvieron a pie.

La segunda vez intentan expulsarlos a África creyendo que al estar más lejos ni se pensarían el hecho de volver. Pero no fue así, de nuevo vuelven todos ellos.

Por último, el propio conde de Salazar se encarga de expulsarlos al no fiarse de sus subordinados, pero tampoco consiguen que se marchen definitivamente ya que al poco tiempo vuelven.

Tras varios años, en 1609, de nuevo llega un grupo de hombres, mensajeros del propio rey con un escrito el cual decía;

“En nombre del rey se ordena que todos los llamados moriscos, así hombres como mujeres e hijos, deben abandonar la Península. Para ello se los trasladará a la costa donde serán llevados en barcos a África”

Al oír la noticia hubo numerosas revueltas, gran parte de los futuros expulsados habían comenzado a desarrollar su vida en España, al fin habían conseguido ganarse el respeto de una mayor parte de los españoles de esta zona. Ahora todo se les había puesto en contra; eran insultados, escupidos e incluso agredidos por aquellos que eran sus amigos.

Como la gran mayoría se opuso a esto, surge un conflicto entre españoles y moriscos, hubo numerosos muertos por parte de ambos lados, mujeres y niños se precipitaban al mar, lo que daba una sensación de una gran fiesta en la playa realmente era una guerra.

Parte de los moriscos veían esta salida de España como algo bueno ya que fueron mal tratados y perseguidos continuamente y ya querían acabar con eso, por otra parte había otros que no querían abandonar el recuerdo de sus antepasados, y finalmente había un gran número de moriscos a los que habían llegado rumores sobre su llegado a las costas africanas donde no se les recibiría de buenas maneras, por lo que no quería abandonar la Península. También tenían miedo de que las embarcaciones no fueran seguras así como de que los capitanes ordenaran la muerte de estos.

Esto supuso una gran pérdida de cultura para España que aprovechó África.

Como muchos supusieron con la llegada de las tierras africanas fueron asaltados por tribus nómadas en la costa de Orán. Finalmente se instalaron en Túnez dando lugar a nuevos barrios en los que vivían exclusivamente los moriscos, tras un tiempo consiguieron el respeto del país ya que esto supondría un beneficio económico, demográfico, cultural… para el país que anteriormente había sufrido la decadencia de estos tras verse afectados por las enfermedades, crisis…

Poco a poco fueron desarrollando su vida en Túnez y acostumbrándose a las diferencias que había con respecto a España. Muchos intentaron volver, otros directamente no llegaron a salir de España donde se quedaron ocultos.